PATRICIA COLCHADO

Hace dos semanas me escapé del Instituto, pues necesitaba tomar otros aires y extrañaba la poesía. Fue así que me aparecí de sorpresa por el Yacana Bar. Sin saber quienes leían o si se presentaba libros o fuera lo que fuera. Me aparecí así. Afuera estaba el Primo Mujica conversando con Giuliana Llamoja, pues ella ha sido publicada en el último fanzine de los Poetas del Azfalto. Ya dentro me encontré con el Kimba Villis, quien siempre está llenándose de poesía, pues como se sabe incursionó con un libro allá en el 2005. Luego de charlar un poco con él. Hallé en una mesa a una amiga mía. Indira Anampa, quien estaba con su novio el pintor Marvin Davila, además de una invitada especial. la poeta chilena Anita Montrosis, quien al parecer publicará un libro con un editor joven de Lima, ya en breve estaremos dando detalles. Pero en el centro del bar, había un gran numero de poetas sentados y charlando muy amenamente. Entre ellos Wilver Moreno, Luis Boccelli, Diego Lazarte, Rocio Fuentes y otros poetas más.

Fue así que salieron a la lectura 7 jovenes poetas. Entre ellos al medio estaba una poeta que no esperé encontrar, pero que sinceramente me alegro oírla. Patricia Colchado, a quien ya había oído el año 2008 en la FIL Lima de ese año, junto a otras voces femeninas en una velada poética que realizó la CPL. Además de haber leído algunos poemas de ella en blogs.

Patricia radica en Alemania, pero se había dado una escapada por aquí y luego iría a su natal Chimbote. Desde su primer libro llamado Blumen, que traducido del alemán quiere decir Flor, pues todos los poemas llevan nombres de flores. Les dejo para su lectura estos poemas que espero disfruten. Danzemos entonces con tu poesía Patricia.

miro tu espalda

magullada por el deseo

las manchas de tu piel

el aroma helénico de tus cabellos

me miro ahora tendida

sobre la palidez de tus ojos

recién

mi tacto comprende

que tú amaneces en mí

y yo en tu sombra

azalea

dejaré mi cuerpo

como una señal

bajo el agua

para que tu rostro

asome

húmedo y bello

en la penumbra

narciso

deja que mi voz

se siga pintando de heridas

entre claveles y piedras

agrios

el día la hora

y mi llanto perdiéndose

en cada hierba

clavel

PD: El nombre de los poemas aparece debajo al termino del texto. El libro se puede encontrar en la librería El Virrey. Gracias a Patricia por el libro y la dedicatoria.